Marketing es capitanear un barco conocido en océanos desconocidos
Mi respuesta siempre fue sencilla, el Marketing es capitanear un barco conocido en océanos desconocidos, que siempre dependerá de tener claro el horizonte, reconocer que es importante tener cuaderno de viaje, brújula y bitácora, y al mismo tiempo asumir que la travesía muchas veces podrá salir del plan de navegación y estar preparados para ajustar las velas o capear cualquier tormenta, que aguas calmas son más peligrosas, que a veces habrán estrechos incomodos para navegar, que siempre habrá un viento contrarío, un sol agobiante y una ola contra corriente.
Así es que he navegado siempre en el vertiginoso, fascinante y cambiante océano del marketing, que me tiene constantemente con el binóculo calibrado, los chalecos y balsas salvavidas listos, el arnés de seguridad acomodado, el botiquín y mochila de supervivencia organizados, todo lo necesario preparado para poder encarar la travesía. Cada viaje con sus propias peculiaridades, con retos y desafíos, nunca conocerás todo el océano por lo que siempre debes estar prevenido, cambiara el viento, el oleaje y la marea a veces más lento y otras de manera intempestiva, estar siempre alertas, navegar ese océano requiere experiencia, coraje, tenacidad, información, intuición y entre muchas otras cosas, sobre todo la capacidad de reacción oportuna para ajustar las velas en el momento menos esperado.
Al paso de los años, cuando me vi ejerciendo y especializándome en este océano, cada vez fue envolviéndome más, y cuando se me dio la oportunidad de poder compartir mis viajes desde las aulas, me di cuenta que disfrutaba tanto no solo ser capitana de mi barco, sino poder compartir mis experiencias con absoluta convicción de que estaba formando nuevos capitanes capaces de elevar anclas con su propia tripulación.
Y aquí me tienen prácticamente un poco más de dos décadas navegando, desarrollando con dinamismo y creatividad mi área de experticia, construyendo y sumando desde la experiencia y el desafío, construyendo desde la academia y medios de formación, generando y abriendo espacios de difusión y divulgación, apoyando a soñadores para que vean realizados sus sueños, involucrando a escépticos y moviéndome a la velocidad del desarrollo del oleaje del contexto.
Podría dar un sinfín de razones por las cuales dedicarme profesionalmente al marketing ha sido la decisión más acertada. El marketing además de todas las satisfacciones que me ha generado a lo largo de mi vida profesional, sin contar las noches de desvelo y los días inquietantes a contra tiempo, lo mejor que me ha brindado es la oportunidad de compartir; compartir mi experiencia, mi conocimiento a través de las aulas, haberse convertido en ese reto constante de seguirme formando para poder formar. El poder brindar a mis estudiantes herramientas desde la argumentación vivencial, desde mi experiencia profesional y como agente activo de una maravillosa experiencia.
Entender y ver de qué manera el marketing puede ejercer un impacto transformacional en el mundo, en las sociedades, en las empresas, en la educación y en las personas, hace que cada día me motive a seguir aportando desde mis habilidades y potencialidades.
Por eso estoy aquí, sigo aquí, porque soy testigo vivencial de que el mundo del marketing se ha convertido en apasionante desafío, donde aprender es una constante, donde nada está escrito en piedra y lo único seguro es que seguirá evolucionando conforme el mundo vaya avanzando.
El Marketing es capitanear un barco que, sin importar su tamaño o dimensión, siempre enfrentara los mismos desafíos en el océano, ajustar las velas a tiempo cuando hay cambio de viento, sortear los mejores recursos cuando aparezcan las peores tempestades, saber cuándo mantenerse anclado es necesario, reconocer que las olas son movimiento, que un poco de agua en el barco no implica necesariamente hundimiento y que aguas tranquilas a veces es señal de maremoto……
Siempre podremos prever hacia donde debemos ajustar las velas y mover el timón, pero muchas no sabemos realmente si el oleaje estará a nuestro favor. Marketing es capitanear un barco conocido, en océanos desconocidos….
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